En el Ministerio de Salud elevaron la alerta por el incremento de los casos de adicciones en el sistema sanitario provincial.

Según datos oficiales, en el primer semestre de 2023 se registró un aumento de un 7% de las consultas en los tres niveles de atención, tanto en Centros de Atención Primaria de la Salud (CAPS), policlínicos y hospitales del interior, y en los hospitales de alta complejidad, respecto del mismo período de 2022.

“Hubo un crecimiento este año, con relación también al contexto prepandemia de coronavirus: 2020-2021”, agregó el director de Salud Mental, Walter Sigler.  “Es una alarma que lleva a tomar acciones interministeriales, intersectoriales para abordar esta situación”, acotó.

Según el profesional, esa variación en los números de las consultas en los primeros seis meses del año se debió, como primer factor, al policonsumo, es decir, alcoholismo asociado a distintas sustancias como cocaína, marihuana, benzodiacepina. Lo siguió el alcoholismo en particular.

“Sabíamos que en la pospandemia íbamos a tener un incremento de las consultas por adicciones. Esto ha reflejado cómo el consumo de alcohol se ha acrecentado, principalmente, por la vivencia durante la pandemia. Por la pérdida, sea de un ser querido, contenciones afectivas, separaciones, pérdidas laborales o económicas, el consumo de sustancias, entre ellas el alcoholismo, se profundizó entre la gente”, enfatizó.

Reunión oficial

Con los datos sanitarios, el ministro de Salud, Luis Medina Ruiz, se reunió el jueves pasado con referentes de Salud Mental, la Secretaría de Estado de Red de Instituciones Intermedias en Consumos Problemáticos, la Secretaría de Políticas Integrales sobre Adicciones del Ministerio de Desarrollo Social y del Observatorio Provincial de Drogas.

Tras el encuentro, Sigler apuntó a “reforzar  la prevención en todos los niveles, no sólo en lo educativo, sino también en las organizaciones no gubernamentales, donde están los barrios, los sectores eclesiásticos”.

“Tenemos que ver de qué manera trabajamos con los docentes para brindarles herramientas necesarias para la detección y el abordaje oportuno y precoz, y de esa manera ir actuando con base en cómo son nuestras adolescencias”, señaló.

El director destacó que “las adolescencias no son las mismas que las de 2020”. “Es importante analizar los datos estadísticos e indicadores en cuanto a las consultas por género, ya que dentro de los tres niveles de atención el 70% corresponde al masculino y el 30% al femenino”, enfatizó.

“Sin embargo, dentro de la Red de Instituciones Intermedias, lo que tiene que ver con la Secretaría de Adicciones, responde más al género femenino, donde asisten las madres, hermanos, esposas de personas que tienen consumo problemático de sustancias. Tenemos que disponer de espacios para hacer psicoeducación con los familiares, que son los que consultan y también atraviesan la parte de esta problemática”, destacó.

La emergencia

El Ministerio de Salud elevó la alerta a raíz del aumento de las consultas en los centros sanitarios, en momentos en que en los barrios se reclama que la ley de salud mental, vigente desde 2010, se aplique de forma completa e integral en Tucumán.

Especialistas de las dependencias oficiales de los servicios contra las adicciones, como en los Centros Primarios de las Adicciones (Cepla), que dependen del Ministerio de Desarrollo Social provincial, advirtieron días antes el aumento de la demanda por atención, producto del agravamiento del consumo de sustancias y de la violencia en los barrios de la capital, al menos.